Tengo piedras de bismuto con una pureza del 99,9%. También tengo unos imanes con una fuerza tal que no soy capaz de separarlos con mis manos. Haciendo una barra con 20 imanes de estos y acercándolos a los trozos de bismuto no se mueven ni de coña. Al tacto no noto ni la más mínima repulsión, por lo cual, dudo mucho que Fáraday consiguiera mover una piedra de bismuto con un imán de los de aquellos tiempos.El fenómeno del diamagnetismo fue descubierto y nominado por primera vez en septiembre de 1845 por Michael Faraday cuando vio un trozo de bismuto que era repelido por un polo cualquiera de un imán; lo que indica que el campo externo del imán induce un dipolo magnético en el bismuto de sentido opuesto.
He fundido bismuto y lo he dejado caer desde un metro de altura a un vidrio para hacer una lámina fina. El grosor de la lámina es menor de 0,2 mm. La lámina descansa sobre los imanes sin el menor intento de levitación.
Si suspendes la lámina con un hilo entonces sí que la puedes hacer girar al ser repelida cuando la acercas un imán por los lados, pero no mucho más que si lo haces con un sucedaneo de la naftalina.
El clásico experimento de la levitación de un imán entre dos trozos de bismuto.
Aquí sí que he tenido éxito, pero me ha costado.
He probado con imanes de muchos tamaños. Con un campo magnético muy potente o muy débil no levita, pasa de abajo a arriba, no se puede mantener estable en el aire.
Un buen resultado lo he obtenido con imanes pequeños, dos cilíndricos de 10X10 mm (con uno o con más de dos no sale bien) y otro de 5 de diámetro por 2 de grosor.
Todos los imanes son de neodimio-hierro-boro.
http://www.youtube.com/watch?v=ylSzIa99Jw8